lunes, 10 de septiembre de 2012

Dios
Concédeme
Serenidad
Para aceptar
Las cosas
Que no puedo
Cambiar
Valor
Para cambiar
Las que
Si puedo
Sabiduría
Para reconocer
La diferencia

“Solo por Hoy” tratare de pasar el día sin esperar resolver el problema de toda mi vida en un momento. Solo durante doce horas puedo proponerme hacer algo que me espantaría si creyera tener que seguir haciéndolo durante toda la vida.
“Solo por Hoy” seré feliz. Esta verdad que dijo Abraham Lincoln:”casi todo el mundo es tan feliz como se propone”. Hoy la pondré en práctica.
“Solo por Hoy” me ajustare a lo que es, sin tratar de amoldar todo de acuerdo con mis deseos. Tomaré la “suerte “como venga y me acoplare a ella.
“Solo por Hoy” ejercitare mi alma de tres formas: le hare un bien a alguien sin esperar recompensa y sin que nadie lo sepa; si alguien se enterara esto no contaría. Hare por lo menos dos cosas que no quiera hacer, solo como un ejercicio. No le demostrare a nadie que mis sentimientos han sido heridos, puedo estarlo-pero hoy no lo demostrare.
“Solo por Hoy” tendré un programa a seguir. Quizá no lo siga con exactitud, pero lo tendré. Me salvare de dos plagas: la prisa y la indecisión.
“Solo por Hoy” seré agradable. Me mostrare lo mejor que pueda. Vestiré apropiadamente, hablare en voz baja, actuare cortésmente, no hare critica alguna, no le encontrare faltas a nada, y tratare de no superar ni dirigir a nadie más que a mí mismo.
“Solo por Hoy” me tomare media hora de calma para mí mismo, y estaré sin tensión. En algún momento durante esa media hora, tratare de tomar una mejor perspectiva de mi vida.
“Solo por Hoy” no tendré miedo. Tratare especialmente de no sentir miedo a disfrutar de lo que es bello, y creer que del mundo he de recibir de acuerdo a lo que le dé.